Estudio: qué refleja este conflicto de mí (dinero, hombres, pareja…)

TRANSCRIPCIÓN

Hoy estreno una nueva sección donde analizo casos reales que han salido en consulta para compartir conclusiones que os pueden servir en vuestro día a día.

 

Hola a todos, soy Ire Martín, publicista, escritora y diplomada en bne, y en este podcast hablamos de mentalidad, emprendimiento, psicología y mucho amor con humor.

 

Espero que estéis todos genial y disfrutando del día.

 

Como os decía, hoy estreno sección donde comparto algunos casos reales que he tratado en sesión para que podáis ver más ejemplificada la evolución de un patrón.

 

El tema que he escogido para comenzar, tal vez sea un poco polémico pero voy a intentar explicarlo con calma y amor para que se transmita el mensaje correctamente.

 

Lo que me deja tranquila es el mantra de la tuitera Barbijaputa: soy responsable de lo que yo digo y no de lo que tú entiendas jajaj.

 

Tenemos que pensar que cuando existe un conflicto en nuestra vida, sea del tipo que sea: emocional, físico, mental, etc. Siempre ocurre como consecuencia de un desequilibrio entre polaridades.

 

Para que te hagas una idea, yo siempre lo explico como que el universo no se queda con nada de nadie y siempre tiende a equilibrar.

 

En tu propia vida, en tu propio día, en tu cuerpo, en tu ADN familiar, en tu epigenética, en todo.

 

Y qué equilibra? Esas dos polaridades. Por ejemplo, si hay un exceso de control y necesitamos que todo se haga como yo digo y cuando yo digo porque sino entro en catarsis y ya empiezo a despotricar y decir que nadie me toma en serio o la interpretación que le quiera dar, si ocurre esto, seguramente me rodee de gente que sea toooodo lo contrario y que tiendan al descontrol absoluto. ¿Una putada? Bueno, yo más bien lo llamo oportunidad para encontrar el equilibrio, pero otros lo llaman putada, sí jajajaja.

 

Ya en serio.

 

Entendéis lo que os quiero decir, ¿verdad? ¿Qué ocurre? Que solemos vivir tan en piloto automático, que esto se nos olvida infinitamente. Nos sabemos la teoría (o ni eso) de que el otro nos refleja algo nuestro que no nos permitimos ser o que tenemos en exceso pero no lo vemos. O muchas veces, y esto es mi favo, pensamos que sí en todo pero que lo que vamos a contar es la excepción ajjaja. Esto lo único que muestra es que estamos secuestrados por nuestro inconsciente y las proyecciones de nuestros programas.

 

La explicación es esa, los conflictos siguen siendo conflictos porque no conseguimos disociar/separar los hechos reales de la interpretación que le damos.

 

Esa es la clave para realmente encontrar el simbolismo que hay detrás y que le hace a tu inconsciente interpretar eso y no otra cosa.

 

Te pongo un ejemplo y nos metemos de lleno en los casos de hoy.

 

Alguien va por la calle muy cargada con bolsas y demás y otra persona se acerca para ayudar.

 

Para alguien será un “ostia, gracias, que amable” y para otra persona significará que le ven débil y que no puede y se pondrá a la defensiva.

 

Qué influye? Puede ser que quien va cargada sea una mujer y le vaya a ayudar a un hombre y le salten todos los programas inconscientes con eso. Puede ser al revés, que un hombre sea el que vaya cargado y una mujer se le acerque… Todas las combinaciones posibles. Y todas ellas traen una lectura y un mensaje diferente dependiendo de lo que la persona identifique como conflicto.

 

Y ahora sí, es cuando entro con los casos.

 

Os traigo 3 casos a la vez que casualmente luego tuvieron un desenlace con similitudes para que veáis que nunca podemos extrapolar nada al 100% de las personas que les pase algo. Cada creencia se expresa de una forma distinta en nuestra vida y esto es un claro ejemplo de ello.

 

Esta es una de las razones por las que hace unos años entendí que el método que conocemos como biodescodificación se había quedado un poco obsoleto en algunas cosas y es una de las grandes diferencias con la bioneuroemoción. Un problema de naming de nuevo porque tienen nombres parecidos y a veces se confunden cuando no tienen naaaaaaada que ver.

 

Al grano, Ire! Joder, es verdad.

 

Bueno, pues os cuento. Los casos de 3 mujeres distintas eran:

 

  • Bloqueo al arrancar su proyecto de emprendimiento. – Irene
  • Conflicto por la incapacidad para ahorrar. – marta marido disfruton
  • Dificultad para ser independiente económicamente. Casada con tu madre.

 

En el primer caso, había crecido con un padre ausente que había desaparecido de su vida en los primeros años de su vida y con el que aún no tenía ningún tipo de relación. Cuando le preguntabas por su pareja, hombre, te contestaba pero sus gestos inconscientes ya mostraban que había algún conflicto con el hombre.

 

En el segundo, pasaba algo parecido pero se mostraba con un exceso de protección de la madre haciéndose incluso responsable de su bienestar y de curarle todos los males. Hago un inciso porque esto, como lo anterior, es algo MUY inconsciente. Tú puedes pensar que es algo normal y que es una preocupación saludable, y tal vez lo sea pero es importante ver qué te motiva a hacer o no hacer para poder sacar una lectura más limpia.

 

Esto no quiere decir que se deje de hacer nada o que se haga, el cambio no nace del comportamiento, nace de la mentalidad. Es igual que muchas veces hay gente que dice que no que no tiene ningún problema que venga de su madre porque ya no se hablan desde hace la torta… Pues no, no consiste en desaparecer ni en estar, consiste en lo que esté pasando en tu vida.

 

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